El pez Arlequín o Arlequín Rasbora, es un pez de agua dulce y cálida perteneciente a la familia de los Ciprínidos.
Está presente en los acuarios desde principios de 1.900, cuando el primer pez Arlequín llego a los acuarios.
Su creciente popularidad, se debe en gran parte a ser un pez muy resistente a las enfermedades, además de ser un pez muy sociable, actitud que le permite compartir espacio con una gran variedad de especies diferentes, podríamos decir que es uno de los 10 peces adecuados para acuaristas principiantes.
El pez Arlequín es un pez realmente pequeño, en libertad no suele sobrepasar los 3,2 centímetros, aunque en cautividad puede crecer algo más, hasta los 4,5 centímetros. Su color habitual varía del rojizo, al rosado o naranja, con una franja negra en forma de triángulo, que va desde la aleta dorsal, hasta el medio de la base de la aleta caudal.
Los colores pueden verse alterados bajo diferentes circunstancias, como la calidad del agua, la salud del pez, incluso dependiendo de su estado anímico y la época de celo. Poseen un cuerpo ovalado, comprimido por los laterales. La boca del pez Arlequín está orientada hacia arriba, posiblemente por ser un pez que se alimenta en la superficie del agua. Entre machos y hembras, no existen grandes diferencias, salvo que las hembras adultas suelen ser más redondas y de mayor tamaño que los machos, más delgados y coloridos. Otra forma de distinguir las hembras de los machos, es que la marca triangular es más nítida y está mejor definida en los machos, mientras que en las hembras tiene un contorno más redondeado.
Es un pez omnívoro, que en libertad se alimenta de pequeños insectos que caen al agua, gusanos, crustáceos y zooplancton. En el acuario, para mantener una alimentación equilibrada, debemos proporcionarle alimentación seca de buena calidad, complementada con alimentos vivos que nosotros mismos podemos conseguir.